El corte de digestión:
entre el mito y la realidad
'Mamá, ¿me puedo bañar ya? ¿Cuánto
tiempo más tengo que esperar?' En los meses de verano, en cada piscina, río o
playa estas preguntas parecen 'el pan nuestro de cada día'. Pero el corte de
digestión realmente, se trata de un cambio de temperatura y no tiene que
ver tanto con la comida, como se puede pensar.
Científicamente
se llama hidrocución y lo que lo que coloquialmente denominamos 'corte de
digestión' es la consecuencia de un cambio brusco de temperatura de la piel en
contacto con el agua fría.
De este modo,
el presidente de la Fundación Española del Aparato Digestivo (FEAD),
el doctor Enrique Domínguez Muñoz, define lo que es el corte de digestión.
"Ese
cambio térmico brusco produce una reacción cardiovascular con una disminución
de la frecuencia cardiaca que puede hacer que la persona que la padece sienta
náuseas, a veces vómitos, se maree e incluso pierda el conocimiento",
explica. Esto, científicamente, se llama síncope de hidrocución.
Este
especialista, quiere dejar claro que el riesgo de padecerlo es
independiente de la edad. Incluso, detalla el doctor, la gravedad de este
cuadro es más elevado en personas de edad avanzada o con problemas de
corazón.
¿Por qué y
cuándo se produce?
Domínguez
especifica que el corte de digestión es más probable cuando la temperatura del
agua es especialmente baja o cuando la del cuerpo es especialmente alta. "Son más frecuentes en los
lugares en los que el agua está muy fría, como pozas o piscinas de la
sierra".
Por tanto, el
corte de digestión es más probable que ocurra después de hacer ejercicio físico
o tras una larga exposición al sol. "Si después de estar un tiempo
haciendo estas dos actividades, entras al agua de golpe, hay un alto riesgo de
que se produzca", señala el doctor, ya que "el cuerpo pasa de estar
de 40ºC a 20ºC en cuestión de segundos". Por eso es frecuente en niños,
afirman los especialistas, porque éstos pasan de estar jugando a pleno sol, a
"tirarse rápidamente al gua", sin "conciencia ninguna".
Experimentando así, un cambio de temperatura muy brusco.
Algunas recomendaciones
Las doctoras
del área de Pediatría del 12 de Octubre aconsejan que los niños no permanezcan
directamente al sol durante mucho tiempo, que se pongan siempre gorros y que
estén a la sombra durante y después de las comidas.
El máximo
responsable de la FEAD, por su parte, aconseja entrar poco a poco en contacto
con el agua e ir mojando el cuerpo progresivamente y sobre todo la cabeza antes
de zambullirse. Si a pesar de todo comienza a sentir mareo, visión borrosa o
náuseas, no corra riesgos innecesarios y salga inmediatamente del agua.
"Mejor tener un poco más de paciencia que ser protagonista del susto del
verano", concluye.
Modo de
actuación ante un corte de digestión
Hay que sacar al
afectado fuera del agua.
Si los
síntomas son más leves, y la persona sale sin problemas del agua, y presenta
náuseas y vómitos, lo mejor es mantener reposo
digestivo durante unas horas.
Por el
contrario, si los síntomas son exagerados, si se mantiene el mareo o no se
controlan los vómitos, aconseja acudir a un centro sanitariopara su
valoración.